Una de las principales inquietudes de las familias al momento de llegar a casa con su recién nacido, es creer que a su bebé no le gusta la cuna ya que no logran que duerma en ella por mucho tiempo. Afortunadamente hay formas de resolver este problema y las asesoras de sueño infantil de BabyLab Sleep nos dan algunos consejos.
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Swaddle
Antes de ponerlo abruptamente en la cuna, ponle un swaddle. Esto lo ayudará a sentirse protegido y contenido. Además evitarás que despierte por movimientos involuntarios.
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De a poco
Puedes dormirlo, rotarlo de costado y transferirlo lentamente a su cuna cuando esté profundamente dormido. Prueba levantar un brazo o pierna para comprobar si está realmente dormido.
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Acompaña
Ubícate al lado de la cuna. Cuando tu bebé despierte, puedes intentar poner tu mano sobre su pecho y dar una suave palmadita rítmica para que vuelva a dormir.
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Siestas
Para las siestas intenta la transición dejando que se duerma a tu lado, espera hasta que tu bebé esté dormido durante 20 minutos y luego déjalo en la cuna.
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Lugar de confort
Pasa tiempo con tu bebé en su habitación y cuna para que lo asocie como un lugar seguro, también usar ruido blanco y blackout aportará creando un mejor ambiente de sueño.
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Pide ayuda
Recuerda que si sientes que no puedes lograrlo por tus propios medios o quieres una guía profesional, siempre puedes pedir ayuda a coaches de sueño y/o un especialista.
Fuente:
Consultoras de sueño infantil
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