Una buena nutrición es muy necesaria durante el embarazo. Hay veces que una dieta balanceada necesita un respaldo de suplementos alimenticios para recibir todas las vitaminas y minerales que tú y tu hijo necesitan.
Planear que todas las comidas incluyan los grupos alimenticios ideales durante el embarazo puede ser agotador, además de que es difícil saber si realmente estás recibiendo los nutrientes necesarios.
Aquí es donde las vitaminas prenatales aparecen como una solución en tu vida: no sustituyen una dieta balanceada, sino que aseguran que no te falten ciertos nutrientes esenciales. Ahora… pueden surgir muchas preguntas sobre el tema: ¿Realmente debo tomar? ¿Cuáles necesito? ¿Tienen efectos secundarios?
¿Qué son?
Las vitaminas prenatales están dirigidas a aquellas personas que están intentando quedar embarazadas o ya lo están. Son suplementos que contienen vitaminas y minerales diarios que se requieren antes y durante el embarazo.
La premisa es que tu bebé requiere ciertos alimentos que benefician su desarrollo y crecimiento. Además, te “quita” nutrientes que tu también necesitas, por lo que debes aumentar su consumo. También tiene que ver con que tu cuerpo pasa por una serie de cambios y necesita fortalecer ciertos aspectos para prepararse para el parto.
Los nutrientes deben provenir de los alimentos que comes organizando una dieta balanceada y evitando consumir aquellos que pueden ser dañinos durante el embarazo. Sin embargo, muchos doctores recomiendan tomar vitaminas prenatales como complemento de una pauta de alimentación beneficiosa.
Hay algunas mujeres que pueden sufrir ciertas molestias o efectos secundarios al tomar vitaminas prenatales, que usualmente son incomodidades leves y no son dañinas para tí ni tu bebé. Algunas de las molestias pueden ser estreñimiento o náuseas.
Si este es tu caso, habla con tu doctor para que te indique otras vitaminas. También puede ayudar tomarla junto con algún alimento o antes de acostarte.
Cuándo y por qué tomar suplementos
Consulta con tu doctor cuándo y cuáles debes tomar. Lo ideal es que comiences a tomar vitaminas prenatales cuando empieces a intentar quedar embarazada, y continúes tomando durante todo el embarazo.
Las primeras semanas de embarazo son realmente importantes para la salud y el desarrollo del feto. Tomar algunas vitaminas prenatales ayuda a reducir riesgo de enfermedades y alteraciones congénitas. El cerebro y médula espinal del bebé se forma en el primer mes de embarazo, por lo que debes estar preparada y entregar nutrientes incluso antes de que sepas que estás esperando un bebé.
Los suplementos multivitamínicos comunes no son suficientes para una mujer embarazada, pues no cuentan con los nutrientes específicos para el embarazo. Las vitaminas prenatales contienen minerales especiales para tener un embarazo saludable y sujeto a los requerimientos intrauterinos de tu bebé.
Los suplementos esenciales
Las vitaminas prenatales están disponibles en venta libre y no suelen necesitar receta, sin embargo, consulta con tu doctor cuáles te recomienda a ti particularmente. Los suplementos y vitaminas prenatales pueden venir en distintas formas: píldora, cápsula o gomitas. Otras vitaminas como la A, C, B6 y B12 también son beneficiosas durante el embarazo.
Al elegir qué vitaminas comprar, hay nutrientes principales muy importantes durante el embarazo, los cuales cumplen distintas funciones como prevenir malformación del bebé, entre otros.
Algunos de estos suplementos indicados para embarazados que encontrarás en las vitaminas prenatales son:
- Ácido fólico
Ideal para empezar a consumir antes de embarazarse, ya que contribuye enormemente para el desarrollo del bebé durante las primeras semanas. Es un tipo de vitamina B que las células del cuerpo necesitan para crecer. Se ha comprobado que disminuyen los riesgos relacionados con problemas en el cerebro y columna del bebé.
Además de los suplementos, hay alimentos como las verduras de hoja verde, legumbres y cereales que son ricos en folato.
- Calcio
Debido a los altos requerimientos de calcio de un bebé en desarrollo, lo ideal es aumentar el aporte para prevenir una descalcificación de los huesos y dientes de la mamá.
El calcio se puede encontrar en la leche descremada, yogurt y quesos pasteurizados.
- Vitamina D
Hay algunos suplementos de calcio que incorporan vitamina D, pues ésta última ayuda a la adecuada absorción del calcio. Se recomienda para asegurar una buena salud ósea de la madre y el bebé en camino.
Los huevos, algunos pescados, las verduras de hoja oscura y la luz solar contienen vitamina D.
- Omega 3
Hay evidencia científica de que el desarrollo de la vista y sistema nervioso del bebé pueden verse favorecidos por el consumo de ácidos grasos omega-3, conocidos como ácidos grasos esenciales. No pueden ser producidos por el cuerpo humano, sino que se encuentran en la grasa de algunos pescados.
Se recomienda el consumo de dos a tres raciones de pescados grasos a la semana, como salmón y atún.
- Hierro o fierro
Este suplemento es necesario para la regeneración de hemoglobina, la cual transporta el oxígeno en la sangre. Esto ayuda a disminuir el riesgo de anemia, enfermedad muy común durante el embarazo ya que el bebé usa las reservas de hierro de la madre.
Este mineral se puede encontrar en ciertos alimentos como carnes rojas, pescado, pollo, huevos, entre otros.
- Magnesio
Es muy habitual que el nivel de magnesio en las embarazadas disminuya y esto puede causar calambres en las piernas. Es por eso que es bueno que tomes vitaminas prenatales que contengan magnesio en sus componentes.
Comer carne, leche y cereales como la avena, el arroz o la quinoa, ayuda a mantener un buen nivel de magnesio.