La Dra. Javiera Saavedra C., Médica General Infantil (Instagram: @doctorajavi) entrega una visión tranquilizadora a los padres: cada bebés es único y diferente al otro. El peso del bebé es un tema habitual en sus consultas, sin embargo, la mayoría de las veces es una preocupación que no tiene sustento médico.
Una de las cosas que preocupa de sobremanera a los padres durante el control sano es el peso de sus bebés. Muchos comparan de manera inevitable a su bebé con otros niños de la misma edad, ya sea primos, vecinos, conocidos, etc. Ahí empiezan las interrogantes tales como “¿Estará bien de peso mi bebé?” o “Se ve muy pequeño o flaco en comparación al primo”, y claro, la opinión de los familiares (especialmente abuelos) siempre hace ruido en nuestros radares cuando nos dicen “está muy delgado el niño” o “parece que tu pecho no lo alimenta lo suficiente”.
Suele angustiar mucho sentir que nuestros pequeños pudiesen estar bajos de peso, a tal punto que empezamos a dudar de nuestra leche, de su calidad, si será suficiente o no, o si será muy “delgada”.
Pero tranquilas, lo único que deben tener claro es que la lactancia materna es y siempre será el mejor alimento para nuestros bebitos, siempre lo alimenta, nunca se hace agua o es muy “delgada”, su composición va variando a medida que nuestra guagua va creciendo y adaptándose a sus requerimientos, siendo su alimento perfecto y recomendado por la OMS por lo menos hasta los 2 años de vida.
En cuanto a las variaciones de peso, si analizamos las curvas de crecimiento de la OMS podemos ver que, por ejemplo, el peso normal de una bebé femenina de 6 meses que se alimenta con lactancia materna exclusiva a libre demanda puede variar entre los seis kilos y medio y los ocho kilos doscientos gramos, y en el caso de los varones el peso considerado como normal se encuentra entre poco más de siete kilos y casi nueve kilos.
En ambos casos son casi 2 kilos de diferencia, y los dos son considerados como normales para la edad, aunque estamos de acuerdo en que esos 2 kilos son notorios al comparar a un bebé y otro, pero ambos estarían en el peso normal para su edad.
Además, en los primeros meses de vida los niños suelen subir mucho más de peso que en los meses posteriores. Suele pasar que cercano a los 5-6 meses los bebés suben menos gramos que en los meses anteriores y sus padres sienten que “subió muy poco” y se preocupan. Todo tiene una explicación. A medida que nuestro bebé crece y se desarrolla va pasando de estar en su mayoría del tiempo quieto a mover mucho sus extremidades, sentarse, arrastrarse, gatear, pararse y caminar con lo cual gasta mucha más energía que antes y por esto mismo es que comienzan a subir menos de peso que en meses anteriores, estando esto dentro de lo normal.
El antecedente familiar también es muy importante al analizar el incremento de peso de nuestros bebés. En chicos delgados o en el límite inferior del peso normal, suele haber una historia familiar similar en la madre o el padre: padres que refieren que les costó mucho subir de peso y que les dieron todas las vitaminas, remedios caseros y estimulantes del apetito posibles y no subían de peso. Por eso cada caso debe ser analizado cuidadosamente, pues todo bebé es un ser único y especial.
Dra. Javiera Saavedra C.
Médica General Infantil, Urgencia Pediátrica Redsalud y «Consulta en casa»
Instagram: @doctorajavi – Mail: saavedracjaviera@gmail.com