Hace ya varios años que el rol del papá se ha integrado más en la crianza, pero el cambio no es de un día para otro e involucra también a la mamá. ¿Cómo participo y soy activo como papá? ¿Qué puedo hacer como mamá para potenciar su rol?
La presencia del padre en el desarrollo de los niños marca la diferencia e influye positivamente en el bienestar de ellos. Sin embargo, según una encuesta del Sernam, los hombres realizan solo un 29% del trabajo doméstico no remunerado.
La paternidad se aprende con la práctica: es natural tener temores, preocupaciones y no saber cómo hacer ciertas cosas. La coordinación y comunicación entre el padre y la madre es clave y responsabilidad de ambos.
Qué significa ser un padre activo
Ser papá es mucho más que proveer económicamente: implica también entregar afecto, cuidados y crianza de manera activa a sus hijos. La paternidad activa consiste en rediseñar el rol tradicional del padre, el cual anteriormente era de proveedor y hace poco ha pasado a ser de “¿te ayudo?”.
Pero ser un padre activo no se trata de “ofrecer ayuda” a la mamá, se trata de tomar un rol protagonista en la crianza de los hijos y hacerse responsable de lo que significa ser padre.
Se trata de involucrarse desde la concepción en todo lo que significa traer un bebé al mundo y entender que papá hay uno solo, nadie lo puede reemplazar (ni siquiera la mamá).
Tener una relación incondicional con el hijo, ser actor del cuidado y tareas diarias, compartir las tareas de la crianza con la mamá, brindar una crianza respetuosa y de buen trato y estimular el desarrollo del niño.
Beneficios para la familia
Está demostrado que los papás con participación activa en la crianza son figuras valiosas para los niños e influyen positivamente en su desarrollo. Esto puede comenzar desde el embarazo, apoyando y acompañando a la madre.
Algunos beneficios concretos que se pueden notar en niños con un papá presente y activo son:
- Relación positiva padre-hijo: la entrega de amor incondicional, presencia y tiempo va a crear una relación muy fructífera y va a tener un buen impacto en su desarrollo actual y futuro.
- Complemento de estilos de crianza diferentes: la mamá es diferente al papá y esa diferencia es positiva para los hijos. Los niños observan un contraste de estilos de crianza y de vida.
- Con la práctica, el papá será cada vez “mejor padre”. Lo que al principio era desconocido o difícil, con el tiempo y siendo padre se aprenderá las labores de la crianza. Además, se sentirá más realizado.
- Los hijos e hijas con padre presente y activo en la crianza, se desarrollan de mejor manera en áreas como su autoestima, salud física y mental, rendimiento académico y social, entre otras áreas.
- Aquellos niños con papá presente tienen mayores probabilidades de ser un padre comprometido en el futuro.
- La madre tiene menos sobrecarga, por lo tanto, mayor bienestar individual, de pareja y de familia.
Cómo llevarlo a la práctica
Todo suena muy lindo, ¿no? Pero ahora, la parte difícil: ¿cómo SER un papá activo? Implica un cambio de mentalidad, ganas y un esfuerzo, especialmente cuando se tuvo un papá distante o ausente. Este rol al principio puede ser difícil, pero muy valioso, y a la larga muy beneficioso para el papá, la mamá y el hijo.
Algunas ideas para ser un papá presente en el día a día:
- Involúcrate en su rutina diaria: la mañana (lavarse los dientes, vestirse, tomar desayuno, bañarse, prepararse para salir, llevarlo…), luego en sus comidas, cocinar y darle su almuerzo saludable, tiempo libre, entretención, en la noche, etc.
- Ten tiempo de calidad con tus hijos diariamente, y hazlo una prioridad.
- Haz actividad física, deportes, juegos y actividades al aire libre. Cuando juegues con ellos, trata de dejarte guiar y divertirte.
- Conversa con ellos, escúchalos y apóyalos.
- Incentiva sus talentos y felicita sus logros.
- Promueve una nutrición saludable en todas sus comidas.
- Pon límites y reglas adecuadas a su edad, sin castigos físicos ni psicológicos.
- Comparte las labores domésticas y de crianza con tu pareja, divídanse por horarios, por tipo de labor o por día.
- Incorpora a tu hijo en las tareas simples a modo de juego o aprendizaje.
Otra perspectiva: paternidad consciente
Se puede reducir el rol del padre en una crianza de paternidad activa a realizar ciertas actividades. Hacer la comida, darle la comida, bañarlo y cambiar pañales. ¿No es esto un papá hacedor más que uno consciente?
Un papá consciente es aquel que QUIERE hacer la comida porque le importa y se siente responsable de la alimentación de su hijo. El papá consciente busca y ansía pasar tiempo cotidiano y de calidad con sus hijos, desde su propia personalidad y estilo.
Un papá consciente no hace el esfuerzo de ser un papá presente, sino que lo es, porque su paternidad es algo parte de él desde que nació su hijo y no lo puede evitar, tanto como una mamá.
Nadie puede ser mejor padre si es impuesto desde afuera: es un cambio personal, un proceso único y consciente.