Al descubrir que estás embarazada e ir a la primera consulta médica, el especialista podrá calcular la fecha de parto, es decir, te dará un día y mes específico en el que probablemente nacerá tu bebé. ¿Cómo se realiza este cálculo? ¿Qué pasa si nace antes o se pasa de la fecha de parto?
Algunas personas creen que los bebés eligen cuándo nacer. Sin duda hay algunos factores inexplicables que influyen en el nacimiento, como la psique y ambiente de la madre embarazada. Sin embargo, hay cálculos basados en factores biológicos que permiten establecer una fecha probable en la que el bebé estará listo para salir al mundo.
Cómo calcular cuándo nacerá tu bebé
Un embarazo normal dura 40 semanas (aproximadamente 280 días) desde la fecha del primer día de la última menstruación de la mujer (FUM). Si se tiene la fecha de concepción, serían 38 semanas después de esta. Estas dos semanas de diferencia corresponden al periodo de tiempo que existe entre la menstruación y la ovulación (en un ciclo regular).
Esta sería la fecha de parto. El bebé puede nacer 2 semanas antes de esta fecha, o 2 semanas después, lo cual estaría dentro de los parámetros normales de término.
Existen varias formas de calcular la fecha probable de parto:
- Método de los 280 días: a la fecha de inicio de la FUM se le suman 280 días y eso daría la fecha de parto.
- Regla de Naegele: esta es el método oficial recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Consiste en sumarle 7 al día de la FUM y restarle 3 al mes de la FUM. Por ejemplo, FUM: 15/12/2019. Entonces se realiza el siguiente cálculo: 15+7=22; 12-3=9. La fecha probable de parto será: 22/09/2020.
- Regla de Wahl: se suma 10 al día de la FUM y se resta 3 al mes de la FUM. Por ejemplo, FUM: 15/12/2019. 15+10= 25; 12-3=9. La fecha probable de parto será: 25/09/2020.
La fecha de parto también puede calcularse a través de una ecografía. Tu doctor podrá decirte con mayor seguridad entre qué fechas es probable que nazca el bebé.
Si nace antes: prematuridad
Si el bebé nace más de tres semanas antes de la fecha de parto estimada, hablamos de un parto prematuro. Es decir, ocurre antes de la semana 37 de embarazo.
Según qué tan temprano nazca tu bebé, la prematuridad puede clasificarse en:
- Prematuro tardío: nació entre la semana 34 y 36 de embarazo (la mayoría de los partos prematuros son de esta categoría).
- Prematuro moderado: nació entre la semana 32 y 34 de embarazo.
- Muy prematuro: nació antes de la semana 32 de embarazo.
- Prematuro extremo: nació antes de la semana 25 de embarazo.
Aquellos bebés que nacen con mucha anterioridad suelen tener problemas médicos complicados. Cuanto más temprano nazca un bebé, más alto será el riesgo de tener complicaciones.
Las causas específicas de un parto prematuro no siempre son claras. Sin embargo, existen factores de riesgo para el parto prematuro:
- Haber tenido otro parto prematuro antes.
- Embarazo múltiple.
- Embarazos muy seguidos (menos de 6 semanas entre un parto y un nuevo embarazo).
- Concepción a través de una fertilización in vitro.
- Problemas en el útero o placenta.
- Tabaquismo o consumo de drogas.
- Infecciones en los genitales de la embarazada.
- Presión arterial alta y diabetes.
- Obesidad o bajo peso durante el embarazo.
- Estrés, sucesos de violencia o emocionales.
- Antecedente de abortos espontáneos.
- Lesión física.
Si se pasa de la fecha probable de parto: postérmino
Algunos embarazos toman más tiempo y se pasan de las 40 semanas. Si dura más de 42 semanas se dice que es postérmino o embarazo prolongado.
Algunos factores influyen en que el bebé nazca después de la fecha dada, como por ejemplo, que la embarazada no recuerde el día exacto de su último periodo lo que hace difícil predecir una fecha de parto. También puede influir que los ciclos menstruales no tienen la misma duración y muchas mujeres son irregulares.
La mayoría de los bebés postérmino nacen saludables. Sin embargo, a medida que se pase la fecha prevista de parto, la placenta no trabaja tan bien como antes. Esto podría disminuir la cantidad de oxígeno y nutrientes que le llegan al bebé, por lo que podría causar complicaciones en el bebé, dificultades durante el parto y aumentar las probabilidades de aborto espontáneo o muerte fetal (nace muerto).
Es por esto que muchas veces los doctores podrían decidir que se necesite una cesárea o intentar inducir el parto para sacar al bebé y así cuidar su salud y la de la madre. Quizás quiera realizar algunos exámenes, los que pueden mostrar que el bebé está sano y que la cantidad de líquido amniótico es normal. Quizás decida esperar a que entre en trabajo de parto de manera natural.
Pocas mujeres dan a luz en su fecha de parto. La mayoría tiene que esperar hasta 2 semanas después para que nazcan. Lo importante es que la madre y el bebé estén siendo controlados por médicos.