Al contrario de lo que algunas personas pueden pensar, las mujeres no somos fértiles todos los días del mes. Normalmente hay solo seis días en los que puedes quedarte embarazada, por lo tanto, si quieres producir o evitar un embarazo, es importante conocer tu ciclo y saber identificar tu período fértil.
Los días en los que se puede producir un embarazo son el día de la ovulación y los días cercanos a ella. Para identificar cuándo ovularás, hay varios signos y métodos que pueden ayudarte. Esto es esencial, ya sea estés planeando quedar embarazada o si quieres evitarlo, tener o no relaciones sexuales durante los días fértiles es fundamental para lograr tu objetivo.
Cómo funciona el ciclo menstrual
El ciclo femenino varía de una mujer a otra, o incluso, de un mes a otro en la misma mujer. Generalmente, un ciclo menstrual regular dura en promedio 28 días, que se cuentan desde el primer día de menstruación. Si tu ciclo dura entre 21 y 35 días, estás dentro de los rangos comunes.
El ciclo menstrual tiene dos fases: la fase folicular y la lútea. La primera se da entre el día 1 y el día 14, en el que suele producirse la ovulación. En los primeros 3-6 días del ciclo se produce la menstruación. Durante la fase folicular, el estrógeno empieza a aumentar y se expulsa un nuevo óvulo desde el ovario.
La ovulación se produce en la mitad del ciclo, cuando el óvulo desciende desde el ovario a través de las trompas de Falopio y llega al útero. Aquí se experimentan los días fértiles: el día 14 más los 2 días anteriores y posteriores a ella. Si se tienen relaciones sexuales durante estos días, el espermatozoide tiene muchas probabilidades de fecundar el óvulo.
La fase lútea es la segunda mitad del ciclo, entre los días 15 y 28. Aquí empieza a aumentar la progesterona en preparación para la siguiente menstruación (si no estás embarazada).
El hecho de que una mujer sea fértil no sólo en el día de la ovulación tiene que ver con que un espermatozoide puede sobrevivir entre 48 y 72 horas dentro del cuerpo de la mujer. Por lo tanto, los días anteriores a la ovulación también cuentan como días en los que debes evitar relaciones sexuales o usar protección (si no quieres quedar embarazada).
Debes saber que determinar el momento preciso de la ovulación no es tan fácil, pues tu ciclo puede variar debido a factores que podrían alterarlo. Sin embargo, es posible con ayuda de ciertos métodos.
Calcular los días fértiles
Durante la ovulación, la mujer experimenta cambios hormonales que suelen producir alteraciones en su organismo, muchas de ellas visibles o reconocibles. Prestar atención a estos cambios y utilizar ciertos métodos puede ayudar a identificar los días fértiles de tu ciclo.
Algunos de los métodos existentes para predecir los días fértiles son:
- Monitoreo del flujo cervical: esta secreción del cuello del útero cumple la función de proteger y facilitar el camino del espermatozoide hacia el útero y favorecer la fecundación. Para hacer esto durante la ovulación, este flujo varía durante el ciclo menstrual, por lo que pueden ser un indicador de fertilidad si se observa y estudia con atención. Durante los días fértiles, la secreción se vuelve elástica y resbaladiza. Para evaluarlo puedes realizar una exploración con tus dedos: si el fluido se estira con facilidad, podría significar que la ovulación está por venir.
- Medición de la temperatura basal: esta es la temperatura del cuerpo en reposo (usualmente se mide justo al despertar, después de haber dormido al menos 5 horas). Para predecir los días fértiles se recomienda tomar la temperatura todos los días a la misma hora con un termómetro de precisión, y anotar las variaciones de los grados. En un ciclo regular, la temperatura corporal de una mujer aumenta de 0,4 a 1°C durante la ovulación. Para ayudarte a facilitar esta tarea y a recordar hacerlo, puedes usar un monitor de fertilidad que registra tu temperatura diaria y hace los cálculos por ti. Se debe tener en cuenta que la temperatura puede variar por factores externos al ciclo, como por ejemplo: ingerir alcohol, dormir pocas horas, un viaje largo, fiebre, entre otros.
- Test de ovulación: son una herramienta que detecta la presencia y cantidad de la hormona luteinizante (LH). Cuando existe en cantidades elevadas, se trataría de los días antes de la ovulación, ya que esta hormona tiene la función de estimular el ovario para liberar el óvulo. Los test se pueden comprar en farmacias y consisten en unas tiras que se deben poner en contacto con la orina. Se aconseja realizar cerca del día 11 del ciclo.
- Dolor al ovular: el método Mittelschmerz se basa en el hecho de que cerca de 1 de cada 5 mujeres sufren molestias asociadas a la ovulación, ya que justo antes que suceda, la superficie del ovario se tensa. Además, durante la ovulación se segregan fluidos, lo que puede provocar irritación abdominal. Si una mujer experimenta notoriamente estos dolores punzantes (como un calambre), puede usarlos como método para saber cuándo estaría ovulando, por lo tanto, fértil.
- Cambios salivales: hay evidencia de que la saliva de una mujer varía según la cantidad de estrógenos en su cuerpo. Justo antes de la ovulación se produce un gran aumento de estrógenos en el cuerpo de la mujer, por lo que monitorear sus cambios a través de un kit puede servir como indicador de los días fértiles.
- Calendario: un método simple y de bajo costo es registrar los síntomas diarios y la duración de cada ciclo durante un tiempo prolongado. Esto sirve especialmente para quienes tienen un ciclo menstrual regular, ya que así puedes estar segura de que estarás ovulando entre los días 12 y 16 del ciclo. Sin embargo, se ha demostrado que la exactitud de este ciclo es baja y que debe acompañarse con otros métodos, como el de la temperatura o medición de la LH.
Hay que tomar en cuenta que un ciclo que presenta los signos anteriores suele ser en una mujer que no usa ningún método anticonceptivo hormonal, pues estos alteran la cantidad de ciertas hormonas y el ciclo menstrual en general.
Ciclo irregular e infertilidad
Los métodos mencionados pueden ayudar mucho a mantener un control y estar al tanto de nuestro ciclo fértil, y así poder planificar o evitar un embarazo. Sin embargo, hay que tener en cuenta que no todas las mujeres tienen un período de 28 días en promedio. Hay quienes tienen ciclos mucho más largos o cortos, en los que la ovulación no se produce en el día 14.
Este tipo de ciclos son los llamados “irregulares”. Esto se puede deber a distintas causas, una de ellas padecer del síndrome de ovarios poliquísticos, un desequilibrio hormonal que hace que el ciclo cambie mes a mes.
Los ciclos irregulares también pueden asociarse a problemas de fertilidad, por lo que se recomienda que acudas a un especialista si tienes ciclos por encima o por debajo de la duración común (23-35 días).
La infertilidad afecta a muchas parejas alrededor del mundo (cerca de un 16% de ellas). Hay dos factores generales que pueden afectar a la fertilidad de una mujer:
- Problemas hormonales:
- Anovulación: debido a una alteración de los niveles hormonales, la ovulación puede verse afectada ya que el ovario de la mujer no logra desarrollar o liberar un óvulo. Suele suceder en mujeres con periodos irregulares. La alteración hormonal que genera la anovulación puede deberse a cambios drásticos de peso, estrés, enfermedades, etc.
- Síndrome de ovario poliquístico: es un trastorno que se produce cuando los ovarios contienen quistes pequeños, normalmente debido a un desequilibrio hormonal. Uno de los síntomas es tener períodos irregulares o inexistentes y problemas para concebir.
- Problemas en las trompas de Falopio y útero:
- Clamidia no tratada: una causa muy común de la obstrucción de las trompas es una infección por clamidia (enfermedad de transmisión sexual) que no recibió tratamiento.
- Endometriosis: esta afección consiste en el crecimiento del tejido endometrial fuera del útero, lo que puede producir una obstrucción de las trompas de Falopio e impedir la fecundación. Las mujeres que sufren de endometriosis pueden quedarse embarazadas pero con mayores probabilidades de padecer problemas de fertilidad.
Si crees que estás sufriendo algún problema hormonal que podría afectar tu fertilidad o tienes periodos muy irregulares, acude a un especialista para un diagnóstico y tratamiento.